Cargando...

El blog de los sueños y el descanso

sombra

Las mujeres tienen más insomnio que los hombres

Dormir es una necesidad biológica que tenemos las personas con el fin de mantener una vida sana y activa. Sin embargo, en algunas ocasiones, dormir se convierte en toda una pesadilla cuando resulta prácticamente imposible conciliar el sueño. Ello sucede cuando se posee alguno de los trastornos del sueño existentes. Actualmente, las enfermedades del sueño son uno de los motivos de consulta a médicos y psicólogos más común. De entre más de 80 tipos de trastorno del sueño diferentes, el insomnio es uno de los más habituales entre los durmientes. Concretamente, se estima que entre un 10% y un 15% de la población total adulta sufre de insomnio de manera crónica, la mitad de los adultos padecen insomnio en alguna etapa de su vida y un 30% aproximadamente lo sufrieron de forma transitoria como consecuencia de una situación de estrés. Pero, ¿Quiénes sufren más problemas de sueño, los hombres o las mujeres?

Dada la importancia de este asunto, la comunidad científica ha realizado una gran cantidad de estudios sobre los trastornos de sueño, sus efectos en los durmientes y qué perfiles son los más afectados. Para contestar a la pregunta que hemos planteado en el párrafo anterior: ¿Quiénes son los que sufren más problemas de sueño, los hombres o las mujeres? nos basaremos en los resultados de un estudio realizado en la Clínica del Sueño Estivill, en Barcelona. Según los datos obtenidos con dicha investigación, las alteraciones del sueño son significativamente más frecuentes entre las mujeres que en los hombres. Concretamente, según el doctor Estivill, el 22% de las mujeres que acuden a la clínica no descansan bien porque padecen insomnio. Cabe destacar que, dicho porcentaje anterior pasa a ser del 35% cuando la mujer se encuentra en la menopausia.

El estudio sobre el insomnio al que nos referimos, determina que la diferencia entre los afectados por este trastorno del sueño se debe principalmente a los factores hormonales. De ahí que sean las mujeres las que más sufren insomnio. No obstante, existen otros motivos que desencadenan estas diferencias. Según los expertos, la mitad de las alteraciones del sueño se producen por razones físicas y el otro 50% corresponde a las preocupaciones o responsabilidades que tiene la mujer en su día a día, ya sea en su faceta como madre o como profesional.

Según los datos ofrecidos por una encuesta que se realizó en Estados Unidos, se ha confirmado que aproximadamente el 86% de las mujeres tienen un ritmo de vida muy ajetreado, especialmente aquellas que trabajan fuera de casa. Consecuentemente, es común que se sientan cansadas durante el día y exhaustas al llegar a casa. Otros datos obtenidos con la misma encuesta resalta que el 60% de las mujeres tiene problemas para dormir y que una de cada cuatro mujeres padece excesiva somnolencia durante el transcurso del día.

Al parecer, el conjunto: ser madre, areas profesionales más responsabilidades del hogar, suele generar una situación de estrés que puede traducirse en dificultades para conciliar el sueño entre las mujeres. Además, factores como carga psicológica derivadas por las preocupaciones, problemas familiares o cambios que se producen en su cuerpo empeoran todavía más la calidad del sueño de las mujeres. El perfil de la mujer que, por su situación sufre problemas de sueño, corresponde a aquellas de edades comprendidas entre los 40 hasta los 60 años, madres de familia y en situación laboral activa. Tal y como confirman los datos de la Clínica del doctor Estivill.

Claro está que esta situación no es sostenible pues, la falta de sueño y sus consecuencias influyen negativamente en la salud, rendimiento, estado de ánimo, apetito, etc… de todos los durmientes que no consiguen descansar bien durante la noche. Si el problema continúa en el tiempo, los efectos derivados de la falta de sueño aumentan las posibilidades de sufrir graves enfermedades de salud como hipertensión, obesidad, problemas de corazón, etc..

Existe una importante vinculación directa entre un individuo sano y una buena conciliación del sueño. Pues, el sueño en sí mismo efectúa numerosas funciones fisiológicas que la salud de la persona precisa. Las principales funciones del sueño son las siguientes: restablecer los almacenes de energía celular, restaurar la homeostasis del sistema nervioso central y almacenar y conservar todos los datos que contiene la memoria.

 

Para conseguir dormir bien noche tras noche, los expertos en la materia aconsejan llevar a cabo una serie de pautas saludables. A continuación, te presentamos algunas de ellas.

  1. Establecer y cumplir unos horarios regulares de sueño, es decir, establecer una hora fija para acostarse y levantarse día tras día. Por supuesto, ese horario debe respetar las 7 u 8 horas de sueño recomendadas durante la noche.
  2. Dejar un lapso de inactividad durante 20 minutos antes de sueño para relajarse y prepararse para dormir. 3
  3. No llevarse los problemas a la cama. Para evitar el insomnio, hay de relajarse y olvidarse de los malos pensamientos, problemas y del trabajo. Recuerda que la cama es para dormir, no para trabajar.
  4. Disponer del equipo de descanso más adecuado según las preferencias y las necesidades de cada durmiente.
  5. Usar ropa de cama adecuada así como ropa para dormir ligera y fresca que no apriete.
  6. Mantener el dormitorio aireado, ordenado y, a la hora de dormir, entre unos 18 y 20ºC. Para conciliar el sueño de la mejor manera, se debe evitar cualquier tipo de luz y ruido en el dormitorio.
  7. Realizar ejercicio diario moderado, evitar las cenas copiosas y no tomar café ni alcohol antes de dormir.

 

Mujeres con insomnio

Fuente: tecnologiahechapalabra.com

Publicado por el