Según cuenta la revista Muy Interesante, un estudio realizado en moscas de la fruta ha desvelado que existe un gen que regula gran parte del proceso del sueño y que es capaz de determinar sus diferentes trastornos.

 

El gen conocido bajo el nombre de insomniac, según la revista Neuron, cuando sufre una mutación en algunos de los insectos, se manifiesta con claros trastornos del sueño. Una mosca normal duerme una media de 927 minutos al día (15 horas), mientras que las moscas mutadas en este experimento sólo conseguían dormir de media 317 minutos. Además, estas últimas vivían mucho menos tiempo que las normales.

 

El gen insomniac, según afirman los investigadores, activa en las neuronas un proceso de degradación de proteínas en las células relacionado con el proceso del sueño, por lo que abre camino a nuevas investigaciones para el control del sueño a nivel molecular, que podría en un futuro ayudarnos a tratar los diferentes trastornos del sueño, pues estos mecanismos de regulación del sueño podrían ser muy similares en los humanos.