El insomnio es una de las enfermedades del sueño que afecta considerablemente a la población. Se cree que entre un 10% y un 15%, aproximadamente, de la población total adulta sufre de insomnio de manera crónica.
La persistencia del insomnio como indicio de alguna enfermedad también es muy alta. Se estima que un 50% de la población total adulta padecen de insomnio en alguna etapa de su vida y que un 30% aproximadamente sufrieron de insomnio transitorio generado con alguna situación de estrés.
Para tratar de combatir los síntomas del insomnio, en ocasiones, los médicos recomiendan el uso de hipnosedantes. Pero existen otros remedios que puedes probar en el caso de que no desees tomar ningún tipo de pastillas. Te recomendamos las siguientes técnicas que puedes poner en práctica y que te ayudarán a conseguir un mejor descanso.
- Puedes realizar terapia con un especialista que te ayude a evaluar y a determinar si tu rutina del sueño es la correcta o sería conveniente cambiar algunos hábitos por otros.
- Trata de no agobiarte ni ponerte nervioso si cuando estás en la cama no te duermes inmediatamente. En ocasiones puede que dormirse requiera unos 30 o 40 minutos. Cuando esto sucede es recomendable tratar de estar tranquilo, quieto en una postura cómoda y con los ojos cerrados, pensando en algo positivo. Si aún así se permanece despierto es aconsejable levantarse de la cama y leer o escuchar música para distraer la mente y relajarse. Y, cuando entre el sueño, volver a la cama.
- Si sufres estrés y/o te sientes cargado y con molestias musculares que te impiden descansar, necesitas liberar tensiones y relajar los músculos. Prueba técnicas con de relajación, yoga, pilates, estiramientos musculares o también meditación. Los beneficios de estas prácticas repercutirán directa y positivamente en tu descanso.
- Trata de incluir en tu rutina diaria el ejercicio físico. Hacer deporte suave-moderado, como por ejemplo hacer footing o caminar, mejora tu descanso nocturno.
Estas técnicas para relajar la mente y el cuerpo pueden ayudarte a conseguir un descanso saludable y dejar atrás tu insomnio. Debes tener en cuenta también, que el fumar, beber bebidas alcohólicas y bebidas con cafeína y tomar comidas copiosas antes de acostarse influyen negativamente en nuestro descanso nocturno.
