La semana pasada hablamos sobre las pesadillas y cómo evitarlas. Comentamos que un 50 por ciento de los adultos, y sobre todo las mujeres, sufrían pesadillas en sus horas de descanso.
En el caso de los niños, según nos cuentan en guiainfantil.com, los problemas de sueño están relacionados, en su mayoría, con los hábitos irregulares de sueño o con la ansiedad de irse a la cama y quedarse dormidos. En su primera etapa de desarrollo infantil, la hora de acostarse representa la hora de la separación de los padres y es cuando empiezan a manifestarse los problemas.
Las pesadillas de los más pequeños pueden empezar a los dos años aunque son más comunes en niños de tres a seis años de edad. Estas pesadillas suelen ocurrir durante el sueño ligero y la frecuencia varía de unos a otros.
Los especialistas recomiendan que los padres conozcan pautas sobre cómo actuar cuando sus hijos tienen pesadillas, antes que centrarse en intentar evitarlas puesto que, en general, se desconoce la causa de las mismas.
¿Cuáles son esas pautas?
- Vigilar lo que ven los niños en televisión y en los videojuegos, sobre todo antes de la irse a la cama.
- Estar preparados y asegurarse de que pueden oír a sus hijos si lloran durante la noche.
- Atender a los niños, ayudarles, tranquilizarles y consolarles. Intenta usar un tono de voz suave y cariñoso y diles que no se preocupen y se vuelvan a dormir.
- Mantener la calma, si estas nervioso sólo empeorarán las cosas.
- Dejar que te cuenten la pesadilla: juntos podéis cambiarle el sentido a la pesadilla y darles un final más alegre.
- Leerle un libro e intentar que se olvide de la pesadilla.
Esperamos que la información os resulte de interés. ¡Dulces sueños..!
