La semana pasada os contamos cuál era el origen de la siesta y os dijimos que esta tenía grandes beneficios para la salud. Hoy, como nos preocupamos por tu bienestar, os detallamos cuales son esos beneficios tanto para los niños, los adultos y para las personas mayores.
Según los expertos, dormir durante unos 5,10,20,30 e incluso 40 minutos al día después de comer tiene las siguientes ventajas:
- Ayuda a reducir el riesgo de padecer problemas cardiovasculares e infartos fatales
- Nos permite relajar los músculos, evitar el estrés y aliviar tensiones
- Elimina la fatiga física y mental
- Ayuda a realizar mejor la digestión
- Mejora de la calidad de vida
- Aumenta la capacidad de atención
- Favorece la memoria
- Nos enriquece con energía, positivismo y mejor humor
- Potencia la belleza física
- En los niños, ayuda a su desarrollo neurológico.
- En las personas mayores, los beneficios se traducen además en un aumento de la calidad de vida y longevidad de la misma.
¿Qué os parecen? Ahora ya tenemos la excusa perfecta para echarse una cabezadita después de comer.